16/10/10

Rosa


Ella sin pensarlo una mañana de octubre recorrió mi cuerpo,
el cual fue amado por un extraño, que mantuvo mi amor constante y tibio, al borde de llorar, y de no querer separarme nunca de él.
Esa rosa ahora marchita la guardo en mi cajón, aunque el tiempo pase ese día jamás lo olvidaré.
y se que no te sirve de nada.

No hay comentarios:

Sé  que ya ha pasado mucho tiempo, de las cosas que ponía aquí, pero a pesar de que mi edad ya haya avanzado mi mente siempre tendrá un poco...